Varias fuentes indicaron que estaban ocurriendo sucesos ilegales en un centro de formación de peloteros
No es para nada fácil para ningún padre confiar plenamente a los entrenadores o dueños de las academias de beisbol el cuidado de sus hijos durante largas cantidades de tiempo que estarían destinados, «en teoría», al pleno desarrollo deportivo. Ahora, a partir de la polémica que surgió este lunes con la difusión de una entrevista realizada por Julissa Céspedes al encargado de la academia de beisbol «Acero Gym», las lupas sobre esos centros de preparación se intensificarán.
En el video que subió la propia entrevistadora a sus redes sociales, se observa como ella misma acusa al propietario de tener una habitación con un «altar» en donde presuntamente abusaba de los chicos.
En su defensa, el acusado, a quien apodan «el Chamo», se excusó diciendo: «Para informarle mejor; como yo estuve en Cuba obviamente estuve en el mundo espiritual, pero gracias a Dios acepté a Cristo y me alejé de ese mundo».
El Pepazo/Meridiano