El ministro de Exteriores de Rusia ha sostenido lo que es la primera rueda de prensa en el marco de su gira por el continente africano después de haberse reunido con su homólogo y con el presidente e Egipto. Ha comentado sobre los temas de mayor relevancia actual, tanto en las relaciones bilaterales como en cuestiones internacionales.
El canciller ruso destacó que Rusia no busca que se levanten las sanciones, pero que al mismo tiempo en lo que se refiere a los problemas de la escacez de alimentos, Occidente debe eliminar las trabas que ellos mismos han creado.
«No pedimos que se levanten las sanciones: estos son problemas que se merecen una atención separada. Simplemente seguiremos desarrollando nuestra economía apoyándose en socios confiables, y no en los que han vuelto a demostrar su total incapacidad de llegar a un acuerdo. En cuanto a los alimentos, aquí nuestros colegas occidentales tienen que eliminar los obstáculos que ellos mismos han creado», aseveró Lavrov.
Lavrov explicó que en el marco del acuerdo firmado en Istambul, Ucrania asumió la responsabilidad de desminar sus aguas territoriales y permitirá que los buques salgan de allí. Mientras tanto, el secretario general de la ONU, António Guterres, se comprometió para proporcionar el levantamiento de las restricciones logísticas y financieras impuestas por EEUU y la Unión Europea contra las exportaciones del grano ruso.
«En este momento, después de la firma de los acuerdos en Estambul, por iniciativa del secretario general de la ONU, él se ofreció como voluntario para lograr la suspensión de esas restricciones ilegítimas. Esperemos que lo logre», dijo Lavrov tras concluir las negociaciones con su homólogo egipcio, Sameh Shoukry.
Según el diplomático, se trata de «sanciones ilegítimas, que impidieron las operaciones con el grano ruso, incluidos los seguros, el acceso a los puertos extranjeros de los buques y de barcos extranjeros a los puertos rusos».
En este contexto, el canciller ruso destacó que uno de los principales obstáculos a la exportación del trigo ucraniano, son las minas plantadas por el régimen de Kiev. De hecho, ahora mismo 70 buques extranjeros siguen estando bloqueados «prácticamente como rehenes». Estos buques provienen de más de 15 países, y uno de ellos tenía que llevar alimentos a Egipto, subrayó Lavrov.
A pesar de todo ello, indica el canciller ruso, Rusia y Egipto siguen trabajando para que las ilegítimas sanciones económicas impuestas contra Moscú no intervengan en las relaciones comerciales entre los dos países.
El canciller ruso también dijo que «no es un actitud seria» cuando EEUU desaconseja a los países de África de colaborar con Rusia. «No puedo comentar situaciones en las que se expresa preocupación con que un país soberano se relacione con otro Estado soberano, encima cuando se trata de Estados con una larga historia de trabajo conjunto, una historia de solidaridad», dijo Lavrov.
«Me parece que no es serio para cualquier país, más aún para EEUU, que se pintan como los líderes mundilales y pretenden llevar la verdad absoluta en útima instancia, no es algo serio que hagan cosas como esta», añadió el ministro de Exteriores.
La crisis ucraniana
Lavrov dijo que Rusia no tiene prejuicios en lo que se refiere a la reanudación de las negociaciones con Urania sobre un mayor abanico de cuestiones, y que esta decisión es de Kiev. Con ello, explicó que la intención del régimen de Zelenski de luchar «hasta el final» no beneficia al pueblo ucraniano.
«No tenemos ningun prejuicio sobre la reanudación de las negociaciones sobre un rango de temas más ámplio, pero eso no depende de nosotros, porque las autoridades ucranianas, empezando por el presidente y terminando con un sinfín de asesores siguen declarando que no habrá ninguna negociación hasta que Ucrania no derrote a Rusia», dijo.
«Cuanto más (los países occidentales) sigan exigiendo que Ucrania luche hasta el final, y todos entendemos como y para quien será el final, tanta más gente morirá y tanto más se prolongará la situaión actual, que no beneficia ante todo al pueblo ucraniano y el Estado», destacó el ministro de Exteriores ruso.
Después de la reunión con el canciller ruso, el presidente de Egipto, Abdelfatah El-Sisi, anunció que El Cairo está dispuesto a apoyar una solución política a la crisis en Ucrania. El mandatario hizo hincapíe en la importancia del diálogo para solucionar el conflicto y resguardar la seguridad y estabilidad mundial.
Egipto y BRICS
El ministro de Exteriores egipcio, Sameh Shoukry, en conversaciones con su homólogo ruso, abordó los contactos de El Cairo con los países del grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
«Hablamos de las relaciones de Egipto con los BRICS, la Organización de Cooperación de Shanghái y otras organizaciones con las que nos coordinamos», dijo Shoukry este domingo en una rueda de prensa tras las conversaciones con Lavrov.
El jefe del departamento de asuntos económicos internacionales de la Cancillería china, Li Kexin, informó anteriormente que hay países que «llaman a las puertas» de los BRICS: Indonesia, Turquía, Arabia Saudí, Egipto y Argentina.
La presidenta del foro de los BRICS, Purnima Anand, dijo más tarde que Turquía, Egipto y Arabia Saudí podrían unirse al organismo «dentro de muy poco». Según el periódico Izvestia, ella expresó la opinión de que esos países «ya están en proceso de adhesión», y al mismo tiempo señaló que no ingresarían de una manera simultánea.
Sobre la cumbre Rusia-África de 2023
Serguéi Lavrov declaró que durante su viaje a Etiopía se reunirá con los dirigentes de la Unión Africana, donde, entre otros temas, se discutirán los preparativos para la cumbre Rusia-África, que está planeada para mediados de 2023.
En particular, se hablará sobre la agenda de la cumbre, que abarcará el comercio, las inversiones, la energía, los recursos naturales y la seguridad alimentaria. También están previstas las cuestiones de cooperación cultural, humanitaria y educativa.
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El Pepazo/Esputnik
